Sam Ojeda / NV Noticias
Xalapa.- Este viernes 1 de agosto, la Biblioteca Carlos Fuentes abrirá sus puertas a la edición número 15 del Maratón Nacional de Lectura, un encuentro que reunirá a destacadas voces de la literatura nacional en una jornada dedicada a las letras, la oralidad y el diálogo entre generaciones.
Organizado por el colectivo Mujeres de Letras, el evento estará dedicado este año al reconocido poeta náhuatl Juan Hernández Ramírez, figura clave en la literatura indígena contemporánea y reciente ganador del Premio Bellas Artes 2024. Traductor, profesor y defensor de las lenguas originarias, el maestro participará en las lecturas programadas durante el encuentro.
“Vamos a recibir escritores de primer nivel como lo es Mario Alonso López, Gloria Ariceaga, Queta Navagómez, Alicia Flores, entre otros como el dramaturgo Ricardo Pérez Quitt”, anunció Nohemí Briones Guzmán, integrante del colectivo organizador.
Durante la inauguración, programada para las 16:30 horas, se presentarán novelas, cuentos y poemarios de autores provenientes de distintas regiones del país. “Se encuentra gente que tiene toda una vida en el mundo de las letras, nos visitan de México personas con trayectoria no solamente en nuestro país sino también en el extranjero”, destacó Nidia Sánchez Hernández.
Aunque tradicionalmente este maratón se ha caracterizado por mantener lecturas continuas durante 24 horas, este año se ha introducido una pausa de seis horas. El evento concluirá a la medianoche del viernes y reanudará actividades a las 6:00 de la mañana del sábado para finalizar a las 17:30 horas.
Como parte del programa, también se entregarán reconocimientos a figuras destacadas por su labor literaria y su trabajo en la gestión cultural.
“Son bienvenidos xalapeños y turistas, porque sabemos que Xalapa es una cuna cultural importante. Es un honor recibir esta lluvia de escritores y poetas. Todos son bienvenidos”, expresó Nidia Sánchez.
Con una nutrida agenda de lectura, reflexión y encuentro, el Maratón Nacional de Lectura reafirma a Xalapa como un epicentro literario donde las palabras continúan tejiendo comunidad.
