Jesús Utrilla – NV Noticias
Han pasado más de doce meses desde que Enrique Molina Tejeda fue visto por última vez, y su familia continúa exigiendo justicia. El joven desapareció en 2023 junto a su novia, cuando ambos salieron rumbo a una tienda en la colonia Lomas del Mar, en el municipio de Boca del Río. Desde entonces, su paradero sigue siendo un misterio.
Ruth Molina Tejeda, hermana de Enrique, ha sido la voz más constante en esta búsqueda. Recuerda a su hermano como un muchacho tranquilo, dedicado a sus estudios de fin de semana y apasionado por el fútbol.
“Era alegre, muy familiar, siempre con un balón en la mano. No tenía problemas con nadie”.
Según relata, la última información que recibió fue que Enrique y su novia fueron privados de la libertad mientras caminaban hacia un comercio cercano.
“Me dijeron que salieron a la tienda y ahí los raptaron. Nadie más volvió a verlos”
La denuncia fue presentada ante la Fiscalía General del Estado, pero, hasta el momento, no ha habido avances significativos en el caso. “Todo lo que se ha agregado a la carpeta de investigación lo hemos conseguido nosotros como familia. La autoridad no nos ha dado respuestas ni ha seguido ninguna línea clara”.
El dolor se agrava ante la inacción institucional. Ruth también lamenta que la familia de la novia de Enrique haya optado por alejarse de la búsqueda, aparentemente por miedo. Pese a ello, ella no ha dejado de moverse, investigando por su cuenta y tocando puertas en busca de pistas que los acerquen a su hermano.
Enrique Molina tiene una estatura de aproximadamente 1.70 metros, piel morena, cabello rizado, una cicatriz en la ceja izquierda y un lunar sobre el labio derecho. Su complexión atlética lo distinguía, ya que el fútbol era parte esencial de su vida.
