Fuerzas rusas tomaron el control este viernes de la central nuclear más grande de Europa después de un ataque que provocó un incendio en el complejo, según informó Ucrania, elevando las apuestas en la invasión del presidente Vladímir Putin mientras sus tropas atacan ciudades de todo el país.
Los bombardeos rusos provocaron durante la noche un incendio en un complejo de entrenamiento de la planta de Zaporiyia, en el este del país, según informaron funcionarios ucranianos, pero los servicios de emergencia lo extinguieron y no hubo víctimas. Ucrania comunicó al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) que el incidente “no afectó a equipos ‘esenciales’” y que no se registraron cambios en los niveles de radiación.
Rusia ya controla las instalaciones nucleares ucranianas de Chernóbil, escenario de una gran catástrofe en 1986, y sus fuerzas llevaban días acercándose a Zaporiyia, mientras el OIEA expresaba su creciente preocupación por la seguridad de las instalaciones nucleares del país a medida que se intensificaban los combates.
El presidente Joe Biden habló con su homólogo ucraniano, Volodymyr Zelensky, cuando surgieron informes del ataque y los líderes pidieron a Rusia “cesar sus actividades militares en la zona”, según un comunicado de la Casa Blanca.
“Europa debe despertarse”, dijo Zelensky en un mensaje de video la madrugada del viernes, y agregó que también habló con el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, el canciller alemán, Olaf Scholz, y otros líderes.
“Si hay una explosión, es el fin de Europa”, agregó Zelensky. “Solo las acciones urgentes de Europa pueden detener a las tropas rusas”.
El ministro de Energía, Herman Halushchenko, declaró a Bloomberg Television a primera hora de este viernes que un misil había impactado en la unidad nº 1 de la central nuclear, y que el Gobierno ucraniano estaba buscando más claridad sobre los daños.
Los reactores están “protegidos por sólidas estructuras de contención” y están siendo cerrados de forma segura, dijo la secretaria de Energía de Estados Unidos, Jennifer Granholm, en un comunicado, añadiendo que su departamento había activado su equipo de respuesta a incidentes nucleares.
Fuente: El Financiero